El estrés es una reacción normal a los acontecimientos cotidianos. Sin embargo, el estrés crónico o a largo plazo puede tener un grave impacto físico y psicológico en nuestro cuerpo. El estrés crónico puede provocar graves problemas de salud si no se trata. Afortunadamente, hay formas de ayudar a controlar y reducir los síntomas asociados al estrés crónico.
¿Qué es el estrés crónico?
El estrés crónico es cuando estás en un estado de estrés constante durante largos periodos de tiempo. Puede ser desencadenado por cualquier número de factores en tu vida, como el trabajo, el dinero, las relaciones o otros problemas personales. Cuando estamos en un estado de tensión crónica, nuestro cuerpo está constantemente en un estado de «huir o luchar». Esto puede afectar a nuestra frecuencia cardíaca, tensión arterial y niveles hormonales. Con el tiempo, esto puede pasar factura a nuestra salud.
Causas del estrés crónico
El estrés crónico puede ser causado por cualquier número de factores. Entre ellos pueden incluirse cambios importantes en la vida, como mudarse, casarse o divorciarse, la muerte de un ser querido o tener un hijo. El estrés también puede ser causado por problemas cotidianos como tener demasiadas responsabilidades en el trabajo o en casa, o sentir una presión crónica para satisfacer grandes expectativas.
Además, las preocupaciones de salud también pueden ser un factor importante. Sufrir una enfermedad o lesión crónica suele ser una fuente importante de estrés. También es frecuente que las personas que no pueden cuidar a un ser querido con un problema de salud grave experimenten mucho estrés.
Síntomas de estrés crónico
Los síntomas de estrés crónico pueden variar de una persona a otra, y pueden ser físicos, psicológicos o de comportamiento. Algunos síntomas comunes del estrés crónico pueden incluir:
– Dolores de cabeza
– Tensión o dolor muscular
– Fatiga
– Aumento de la ansiedad o depresión
– Cambios en los patrones de alimentación
– Aumento del consumo de alcohol o drogas
– Dificultad para dormir
– Mayor irritabilidad o enfado
– Mayor preocupación o ansiedad
Impacto a largo plazo del estrés crónico
Con el tiempo, el impacto a largo plazo del estrés crónico puede pasar factura a nuestra salud. La respuesta constante de «lucha o huida» puede tensar nuestro corazón y vasos sanguíneos. Esto puede aumentar el riesgo de sufrir un ataque al corazón o un derrame cerebral. El estrés crónico también puede provocar un aumento del colesterol, que puede dar lugar a la acumulación de placa en las arterias.
Además de aumentar nuestro riesgo de enfermedad cardíaca, el estrés crónico también puede debilitar nuestro sistema inmunitario, lo que lleva a una mayor susceptibilidad a enfermedades e infecciones. También puede repercutir negativamente en nuestra salud mental, aumentando el riesgo de desarrollar ansiedad, depresión u otros problemas de salud mental.
Tratamientos del estrés crónico
Es importante reconocer y abordar los síntomas del estrés crónico lo antes posible para evitar problemas de salud a largo plazo. Existen una serie de cambios en el estilo de vida, así como medicamentos y terapias, que pueden ayudar a controlar los síntomas del estrés crónico.
– El ejercicio puede ser una forma eficaz de combatir el estrés. La actividad física regular puede ayudar a reducir la cantidad de cortisol (una hormona del estrés) que circula por el cuerpo, y también puede aumentar las endorfinas, las sustancias químicas que producen sensación de bienestar en el cerebro.
– Tener un sistema de apoyo sólido puede ser crucial. Poder hablar con alguien en quien confíes sobre lo que estás pasando puede ser una gran fuente de consuelo y alivio.
– Comer una dieta sana y equilibrada puede ayudar a tu cuerpo a enfrentarse mejor al estrés.
– Aprender y practicar técnicas de relajación, como la meditación, ejercicios de respiración profunda o mindfulness, también puede ser eficaz para reducir el estrés.
– También existen varios medicamentos y terapias que pueden utilizarse para tratar el estrés crónico, como medicamentos ansiolíticos y antidepresivos, así como la terapia cognitivo-conductual (TCC).
Conclusión
El estrés crónico puede ser un problema de salud grave si no se aborda. Cambiar el estilo de vida y buscar ayuda profesional puede ayudar a aliviar los síntomas del estrés crónico y mejorar tu calidad de vida en general. Si experimentas alguno de los síntomas mencionados anteriormente, es importante que busques ayuda de un profesional sanitario lo antes posible.