Los requisitos nutricionales varían de una persona a otra, pero una cosa es segura: lo que ingieras tendrá un gran impacto en tu salud. Elegir los alimentos adecuados y adoptar hábitos alimentarios saludables debe considerarse un cambio de estilo de vida a largo plazo. En este artículo se hablará de la nutrición, sus beneficios, consejos para comer bien y formas de hacer que tu dieta sea más sana.
¿Qué es la nutrición?
La nutrición hace referencia a los alimentos que ingerimos y a la forma en que nuestro cuerpo los utiliza. Tu nutrición diaria depende de tu edad, sexo, estilo de vida y estado de salud. Una buena dieta significa que cada día obtienes el tipo y la cantidad adecuados de alimentos de los cuatro grupos de alimentos. Estos son:
1. Frutas (incluyen frutas frescas, enlatadas o congeladas),
2. Verduras (frescas, congeladas y enlatadas),
Grano (panes, cereales, pastas y arroz; los de grano entero son más sanos),
4. Fuentes de proteínas (carnes, aves, marisco, alubias y guisantes, y frutos secos), y
5. Lácteos (leche, yogur y queso).
Las personas con enfermedades crónicas deben hablar con un dietista titulado u otro profesional sanitario antes de hacer ninguna modificación en su dieta.
¿Cuáles son los beneficios de una buena nutrición?
Una buena nutrición tiene muchos beneficios. En primer lugar, una dieta equilibrada puede ayudar a reducir el riesgo de enfermedades crónicas como cardiopatías, diabetes, hipertensión y algunos tipos de cáncer. También puede ayudar a reducir el riesgo de osteoporosis y otras afecciones óseas. Además, una buena nutrición puede ayudar a mejorar el estado de ánimo, los niveles de energía y la función cognitiva.
Consejos para comer bien
Comer bien no consiste sólo en los tipos de alimentos que consumes, sino también en la cantidad y el momento de las comidas. He aquí algunos consejos para comer bien:
Tamaños de ración
Aprender cómo es realmente una «ración» puede ser una forma sencilla de controlar el tamaño de las porciones. Los grupos de alimentos tienen tamaños de ración recomendados, y es importante medir las porciones adecuadamente. En general, el tamaño de una ración de frutas y verduras es una taza, el tamaño de una ración de cereales es aproximadamente media taza, el tamaño de una ración de proteínas magras es aproximadamente tres onzas, y el tamaño de una ración de lácteos es una taza de leche o yogur o 1,5 onzas de queso.
Planificación de las comidas
Reservar un rato cada semana para planificar tus comidas puede ser útil para asegurarte de que comes los alimentos adecuados y en las cantidades correctas. Intenta elegir una variedad de alimentos de cada grupo y, en cada comida, incluye al menos una fuente de grasas saludables y otra de proteínas.
Merienda con inteligencia
Comer entre horas puede ser una forma estupenda de mantenerte lleno y con energía todo el día. Sin embargo, es importante elegir meriendas saludables, como frutas, verduras, yogur bajo en azúcares o frutos secos. Evita las meriendas azucaradas, como los caramelos, que pueden provocar un rápido aumento de los niveles de azúcar en sangre seguido de un desplome.
Mantente hidratado
Beber suficiente agua a lo largo del día es una parte crucial de una buena nutrición. La deshidratación puede provocar fatiga, disminución de la función cognitiva e incluso confusión mental. Asegúrate de beber al menos ocho vasos de agua de ocho onzas cada día.
Cómo hacer que tu dieta sea más sana
Hay muchas formas sencillas de hacer que tu dieta sea más sana, como elegir cereales integrales en lugar de refinados, utilizar métodos de cocción más sanos y sustituir las bebidas azucaradas por agua. Además, algunas tendencias alimentarias populares, como la alimentación a base de plantas y la preparación de comidas, también pueden ayudarte a hacer comidas más nutritivas.
Cereales integrales
Los cereales integrales contienen más nutrientes y fibra que los refinados, por lo que son una opción más saludable. Busca productos elaborados con cereales integrales, como arroz integral, quinoa y pan de trigo integral.
Métodos de cocción saludables
Opta por métodos de cocción como la parrilla, el asado, el horneado y el vapor en lugar de freír. Estos métodos tienen menos calorías y son más saludables para ti. También puedes añadir más sabor a tus comidas utilizando una variedad de hierbas y especias.
Bebidas azucaradas
Sustituye las bebidas azucaradas, como refrescos, zumos y bebidas energéticas, por agua u otras opciones sin calorías. Consumir estas bebidas puede provocar un sobreaumento de calorías y grasas. El agua es una gran opción, ya que puede ayudar a la digestión y a mantenerte hidratado a lo largo del día.
Alimentación a base de plantas
Comer más frutas, verduras, cereales integrales, alubias, frutos secos y semillas puede ayudarte a aumentar tu consumo de nutrientes y disminuir el riesgo de enfermedades crónicas.
Preparación de comidas
La preparación de comidas puede ser fantástica para las personas ocupadas que quieren asegurarse de llevar una alimentación sana. Dedica unas horas un día a la semana para preparar y cocinar varias comidas y luego guárdalas en el frigorífico o congelador para usarlas más adelante.
En definitiva, la nutrición es un componente crucial de la buena salud y el bienestar general. Elegir los alimentos adecuados y adoptar hábitos alimentarios saludables son partes esenciales de un estilo de vida sano. Utilizar los consejos de este artículo puede ayudarte a elegir alimentos sanos y disfrutar de los beneficios de una dieta nutritiva.